jueves, 1 de septiembre de 2011

Nueva ruta nocturna




Este año, como años anteriores, hemos realizado otra ruta nocturna, esta vez un poco más dura, debido a lo escarpado del terreno. Aunque la luna no era llena, si iluminaba bastante. Desde algunos puntos de la ruta, la vista, a pesar de la noche, era bonita. Allá a lo lejos se veían las luces y los destellos de otras poblaciones, que durante el día pasaban desapercibidas. Los olores también se hicieron presentes mientras caminabamos por el sendero, madre luisa, jaras, oréganos, hinojos, etc...




Los caminantes, respetuosos con el medio, paramos para un avituallamiento que la organización tenían preparado y nos agasajaron con frutas del tiempo y de la tierra. Continuamos nuestra marcha hacía la subida de dos puertos de montaña. Fue un poco más duro, pues ya habiamos realizado unos cuantos kilómetros , aún así todos teminamos unos antes y otros después.



En el último trecho un sonido extraño se hacía cada vez más patente, se trataba de un molino de viento que extraía agua de debajo de la tierra y despedía una fina lluvia que caía sobre los caminantes a su paso por este lugar. Agradecíamos esta suave ducha refrescante. Terminamos así la ruta con la llegada a la falda de la sierra, donde el castillo nos esperaba impasible.