Esas calles

Una de las características más pintorescas del pueblo son la situación de sus calles, debido a la orografía del terreno. Estas tienen, en casi todos los casos, una pendiente que puede llegar a ser considerable algunas veces, por ejemplo La Cuesta.Además algunas son estrechas y adaptadas al terreno, por lo que en algunos casos existen escalones para acceder de una a otra, también son curiosos los pequeños "barrancos" que dan acceso a las casas. A veces cada casa tiene su barranco particular en otros casos el barranco es en sí una calle. Por ejemplo la Calle de Zafra una acera es un barranco y la de enfrente no tiene barranco. Estos barrancos desde hace años hasta la actualidad han sido reformados por el Ayuntamiento y ahora poseen un aspecto alegre y colorido debido a la construcción de arriates donde se han plantado flores y plantas que alegran la vista a cualquiera.

En algunos casos esos barrancos son el lugar de encuentro de vecinos para charlar un rato a la caída de la tarde.

Antiguamente las calles del pueblo estaban empedradas, con rollos desgastados por el paso de personas y animales y el agua corría por el medio de la calle haciendo de ellas un pequeño riachuelo que había que salvar con un salto.

Algunas calles son rectas, que no llanas y otras sin embargo son pequeñas callejas que unen a otras calles más transitadas. Algunas son estrechas donde puedes tocar con una mano una pared y con la otra la de enfrente. Pero que las hace diferentes y pintorescas. Hay como digo pocas llanas, la más conocida es la Corredera,por ser una vía principal y una de las más importantes de la localidad, es nuestro paseo que tantas generacíones ha conocido y que ahí se mantiene, como testigo de reuniones, fiestas y paseos repetidos de los coritos.



El nombre de las calles también es curioso desde la calle del Cano, que fue la primera calle que hubo en el pueblo. Parece ser que en ella vivía un hombre cuyo cabello era blanco y por ello ese nombre.

Nombres tan particulares como la calle de la Horca, en ella hubo en la antiguedad una horca. Calle las aceras, Calle el Pilatito, donde parece ser que había una fuentecilla, de ello dan fiel testigos sus casas en las cuales existe más humedad de lo normal. Calle Manceñía, Calle Corral Concejo, Calle el Pozo, Calle los Naranjos, Calle la Ladera, El Pico, cada nombre seguro que fue puesto como referencia del mismo. Igualmente existen calles de lugares con lo cuál nos está informando que por esa calle nos podemos dirigir al nombre indicado, así están Calle de Zafra, Calle los Mártires, que nos lleva directamente a la ermita de los Mártires, Calle del Castillo, Calle Pilar Manceñía, Calle Pilar de Zafra. En otros casos los nombres que se les han dado son curiosos como El Tagarete, La Mojona, de Atrás, Manceñía (estrecha), Albarracín, Carnero,Calle Nueva, De la Morilla, calleja Montero,la Cruz del Real, etc. En otros casos evocando a personajes Calle Duque de Feria, Ana Ponce de León, Hermanp Francisco, Doctor Fadón, Fray Pedro de Feria,

Sus nombres son evocadores pero mucho más gratificante es pasear por estas calles y saborear su verdadero encanto.

Ruta Nocturna por Feria

RUTA NOCTURNA


La noche iba cayendo poco a poco cuando un grupo reducido de caminantes nos reunimos bajo los soportales arcaicos de la plaza porticada del pueblo para iniciar una marcha nocturna.

Un recorrido que se hacía difícil y escarpado, sobretodo para gente iniciada como yo, pero que se preveía interesante y apetecible en una noche de luna llena de este mes de Agosto.

La ruta que cubría un recorrido aproximado de unos 8 kilómetros, estaba prevista que la realizaríamos en unas dos o tres horas. Como digo es una ruta que se nos presentaba con un poco de dificultad, sobre todo por las subidas y bajadas y por los tramos pedregosos del terreno.

Íbamos a caminar por parte del término municipal de Feria pasando por parajes conocidos como el camino de la zorra, las Viñas, los álamos Durán, el Callejón de Sevilla, etc... Como íbamos acompañados por expertos conocedores del terreno, pudimos visitar un horno de cal, se trata de una estructura hecha de piedra, de unos 3 metros de profundidad donde se elaboraba la cal que posteriormente serviría para blanquear las fachadas del pueblo. Igualmente vimos las "bujardas", unas casetas hechas de piedra donde los pastores en otras épocas pernoctaban tras largas jornadas en sus labores de pastoreo.

Cerca de nuestro camino se está el dolmen de "La casa del monje", utilizado en otras épocas por labriegos como refugio en las tareas de recolección. Esa estructura de grandes losas que, hincadas en el suelo, forman un habitáculo circular. Se trataba de un sepulcro megalítico colectivo que se asienta en una zona próxima al río Guadajíra y parece ser, según cuenta el desaparecido cronista de la villa, José Muñoz Gil, que se interpretaba como una casa o cueva construida por un ermitaño, que le servía de cobijo en su solitaria vida de anacoreta, mientras dedicaba su vida a la oración y la penitencia. Razón por la que se denominó la casa del monje; recordemos que próximo se encontraba el convento de San Onofre de La Lapa, hoy en estado ruinoso.

Pasábamos de cuestas prominentes a pedregosas pendientes en poco espacio de tiempo, a veces el camino se convertía en estrechas veredas, por donde sólo podíamos caminar en fila india, los gemelos se resentían, las fuerzas en alguna ocasión flaqueaban pero el empeño por disfrutar e un paisaje a la luz de la luna y por llegar al final se hacía patente en el grupo . Nuestro objetivo o más bien nuestra meta no era otra que arribar a eso de la media noche a la ladera del castillo.

El sonido de grillos y lechuzas se detenían a nuestro paso, los olores a hinojo , orégano, menta y madre luisa nos acompañaban, la suave brisa era agradable. Tras bordear un pequeño montículo nos encontramos con la presencia majestuosa del castillo iluminado, habíamos llegado al final. Fue fantástico.
Más fotos.

Fuentes y Pilares

PILAR DE ZAFRA

En esos días de asueto en los que me he dedicado, entre otras cosas, a pasear, he visitado aquellos pilares y fuentes cercanas al pueblo que en otra época fueron muy concurridos y hoy algunos están tan olvidados.

Hace tiempo, cuando no había un abastecimiento municipal de agua, la gente del pueblo tenía que ir a buscar el líquido elemento allá donde lo hubiera o hubiese. Y dependiendo el lugar del pueblo donde se vivía se dirigían a una u otra fuente, por eso las personas que vivían en la parte más alta, alla por el castillo iban a La Fuentina, El Peón a los Cañitos, o a los Cascajales. Si por el contrario vivían en la parte más baja del pueblo, iban a otras como El pozo de beber, El pilar de Zafra o el Pilar de la fuente de la casa o bien a Borrego, el pilar Manceñia o el Pilar de Abajo. En el mismo centro del pueblo estaba el grifo, donde iba la gente con sus cántaros y garrafas para llegarlos de agua y posteriormente llevarlos a casa. Tb. estaba el pilar de San José. La gente ponía los cantaros en fila uno tras de otro y si había mucha cola se marchaban para posteriormente regresar, todos respetaban las cola.



Igualmente había pilares y pozos donde,además, las mujeres iban a lavar la ropa. No había agua en las casas y mucho menos lavadoras para hacer la colada, asi que una o varias veces a la semana, las mujeres cogían su cesto cargado con la ropa sucia y la llevaban a esos lavaderos públicos donde todas se reunían; así están por ejemplo el Huerto de las Guindas, muy popular, que tenía 25 pilas de lancha y una alberca en el centro de donde se cogia el agua para lavar. También estaba La Sesmería , el Huerto Lobo y el Peón.

HUERTO LAS GUINDAS

LA SESMERIA



Llama la atención la cantidad de fuentes, pozos, pilares y veneros que en el pueblo existían y que se han ido poco a poco perdiendo, aunque algunos aún están ahí impasibles ante el tiempo.

EL PILÓN

EL POZO DE BEBER

San Bartolomé

Es curioso que inicie este blog el 24 de Agosto, cuando en Feria se celebran las fiestas en conmemoración a su patrón San Bartolomé. Se trata de la fiesta de verano. Su organización siempre ha sido a cargo del Ayuntamiento. Según cuenta D. José Muñoz en su libro "esta celebración coincide con un período de escasa actividad compesina, había terminado la siega y la recolección. Un compás de espera para iniciar la vendimia." Hoy dia esta fiesta es el encuentro con los emigrantes y familias ausentes.

Cuando niña recuerdo esta fiesta muy entrañable, durante el día se celebraban diferentes juegos populares, carreras de saco, petancas, partidos de futbol en las escuelas y durante la noche la verbena y al rededor, en la corredera, estaban los veladores donde la gente tomaban sus aperitivos. Por el escaso espacio sólo había una atración para los más pequeños, eso sigue igual. Recuerdo que hubo unos años en los que había un espectáculo al que yo temía, se trataba de un toro de fuego. Alguien se ataviaba imitando a un toro y expulsando fuegos artificiales, no se cómo lo hacía, la verdad es que yo lo pasaba fatal, era horroroso, temía que apareciera por la corredera y por el atrio. Aún así había amigas/os míos que les encantaba poder correr delante o detrás de ese toro ficticio.

La fiesta tenía a su encanto, lo pasábamos bien.

Caminos y Veredas

Estas fotos las tomé recientemente cuando convencí a mi madre para que me acompañara a dar unn paseo por antiguos caminos perdidos que bordean al pueblo y que antiguamente eran muy frecuentados por los labriegos , hoy se han convertido en estrechas veredas pero que conservan su encanto.

Empiezo este blog relacionado con mi pueblo natal. Es una pequeña villa situada al suroeste de la provincia de Badajoz (Extremadura). Mi pueblo tiene mucho que ofrecer al visitante incluso a los mismos "coritos" que así nos llaman a los nacidos y vecinos de esta singular localidad.